¡Vierte un poco de detergente en tu inodoro y mira lo que sucede!

Cumplidos los 30 minutos

Ahora que estás de vuelta, es hora de llegar a la parte más importante. Coge la escobilla de inodoro y frota bien el interior del inodoro con el detergente empapado.

Es muy importante comenzar frotando a fondo antes de enjuagar. Luego, después de limpiar toda la superficie, puedes tirar de la cadena. Inmediatamente serás testigo del magnífico resultado, un inodoro que huele muy bien, limpio y parece haber quedado como nuevo.

Haz tu propio limpiador

También puedes usar detergente para ropa para hacer un producto de limpieza eficaz, como un limpiador multiusos. Coge un recipiente de limpieza vacío y mézclalo añadiendo unos 80 ml de lejía y una cucharadita de detergente en polvo. Añade agua hasta llenar la botella.

Te sorprenderá lo efectiva que es esta mezcla en las paredes del baño y en casi cualquier superficie del hogar. Eliminarás las manchas más difíciles y además va a oler muy bien.